Terminé mi grado en Fisioterapia en la Universidad de Salamanca en el año 2017, margando el inicio de mi trayectoria profesional. Desde entonces, mi carrera laboral me ha llevado a explorar diversos ámbitos, enriqueciendo mi bagaje de conocimientos y habilidades de forma continua.

Mis primeros pasos me llevaron por el mundo del deporte, donde tuve el privilegio de trabajar con varios equipos de fútbol y fútbol sala, de diversas edades y categorías. Esta experiencia me bridó una visión única sobre la importancia de la fisioterapia en el rendimiento y la recuperación de lesiones, así como el trabajo en entornos desafiantes y dinámicos.

Pero las cosas no se quedaron ahí. En este tiempo también me embarqué en formación de posgrado especializada en Traumatología y en el tratamiento del dolor. Con los años he continuado mi desarrollo profesional mediante formaciones adicionales centradas en el tratamiento del paciente con dolor, el tratamiento activo y el uso del ejercicio terapéutico y la terapia manual como herramientas fundamentales en la recuperación de los pacientes.

Una de mis principales metas ha sido mejorar la calidad de la atención al paciente desde el inicio. Esto implica la capacidad de adaptarme a las necesidades individuales de cada paciente, considero que esta habilidad es esencial para un tratamiento efectivo.

En la actualidad, compagino mi labor en FisioLAB con una faceta investigadora, permitiéndome esta dualidad estar a la vanguardia de los avances en el campo de la fisioterapia, manteniéndome constantemente actualizado en un entorno tan dinámico y en constante evolución.

Mi compromiso con la fisioterapia y el bienestar de mis pacientes es inquebrantable. Cada día me esfuerzo por aplicar mis conocimientos y habilidades de manera óptima, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de quienes confían en mi cuidado. La fisioterapia es un campo apasionante y en constante cambio, y estoy emocionado por continuar creciendo y contribuyendo al avance de esta disciplina.